Alfa Romeo ha decidido dar una vuelta de tuerca más a sus modelos más radicales antes de que llegue el relevo generacional. Con los Giulia y Stelvio Quadrifoglio Collezione, la firma italiana lanza una serie muy limitada que busca atraer tanto a entusiastas de la conducción como a coleccionistas, en un momento en el que la electrificación avanza pero la combustión todavía tiene margen de vida.
Esta nueva hornada de deportivos se enmarca en la estrategia de la casa italiana de alargar el ciclo de la actual generación de Giulia y Stelvio, después de haber rectificado sus planes de pasar toda la gama Quadrifoglio al coche eléctrico de forma inmediata. Mientras se trabaja en futuros modelos con opciones híbridas y eléctricas, esta edición especial de gasolina se convierte en una joya y especie de despedida extendida con sabor a homenaje histórico.
Una serie limitada a 63 unidades con guiño a la historia…
Los Alfa Romeo Giulia y Stelvio Quadrifoglio Collezione forman una edición global de solo 63 unidades numeradas, una cifra elegida con intención: recuerda a 1963, el año en que el trébol de cuatro hojas pasó de los circuitos a los coches de calle de la marca con el Giulia Ti Super. Aquel salto supuso que el símbolo Quadrifoglio dejara de ser exclusivo de la competición para identificar a los modelos más potentes y especiales de la gama.
Esta tirada estará repartida entre Europa, Reino Unido, Oriente Medio, China y Japón, con una presencia testimonial en nuestro país: solo dos coches se han reservado para el mercado español. Son cifras que sitúan a estos Quadrifoglio Collezione más cerca de un objeto de colección que de un deportivo de producción convencional, reforzado además por el certificado de autenticidad “Instant Classic” que Alfa Romeo otorga a cada unidad.
Las dos variantes, berlina y SUV, se fabrican en la planta italiana de Cassino, donde la marca insiste en combinar procesos industriales modernos con un grado alto de acabado manual. Cada coche sale de allí con su número de serie bordado en el interior, desde el “1 di 63 Collezione” hasta el último ejemplar, dejando claro que se trata de una pieza única dentro de un lote muy cerrado.
Diseño exterior: rojo exclusivo y fibra de carbono a la vista…
El rasgo más evidente de estos modelos está en su pintura. Los Giulia y Stelvio Quadrifoglio Collezione estrenan dos tonalidades específicas derivadas del histórico Rosso Villa d’Este, color asociado a modelos tan especiales como el 33 Stradale o el 4C Concept. No son un simple rojo más en la paleta, sino dos interpretaciones distintas pensadas para cada carrocería.
La berlina deportiva adopta el Rosso Collezione Giulia, un rojo profundo con matices muy oscuros que, según la luz, puede llegar a verse casi negro. Con este tono, Alfa Romeo busca enfatizar el carácter más extremo y afilado del Giulia Quadrifoglio, con una imagen más seria y agresiva que en otras versiones.
En el caso del SUV, la marca ha optado por el Rosso Collezione Stelvio, una variante más brillante y abierta del mismo concepto. Este acabado pretende subrayar la faceta polivalente del Stelvio Quadrifoglio, que combina prestaciones de primer nivel con un uso más familiar, dando como resultado un rojo que juega más con los reflejos de la carrocería y subraya su tamaño.
Más allá del color, ambos modelos comparten una presencia notable de fibra de carbono en elementos clave. Este material aparece en la insignia frontal, en las carcasas de los retrovisores y, sobre todo, en el techo de carbono visto, un rasgo ya característico en los Quadrifoglio que aquí se convierte casi en seña de identidad. Además de aportar un aspecto más técnico, el uso de carbono ayuda a reducir peso en la parte alta de la carrocería, algo que beneficia el centro de gravedad.
Un interior cuidado al detalle y numerado…
La atmósfera del habitáculo acompaña al envoltorio exterior con un enfoque claramente deportivo pero sin dejar de lado el cuidado por los materiales. El salpicadero está tapizado en cuero, con costuras en contraste de color rojo que se extienden también por el túnel central, las puertas y el reposabrazos, reforzando la sensación de coche hecho con mimo.
Los asientos corren a cargo de Sparco y están terminados en una combinación de cuero y Alcántara, con estructura de fibra de carbono en las versiones más orientadas a la conducción deportiva. Además de sujetar bien el cuerpo en curvas rápidas, incorporan las inscripciones bordadas de la serie limitada, con la numeración individual que indica qué unidad concreta es cada coche dentro de las 63 previstas.
La fibra de carbono continúa en el interior en zonas como el túnel central, la parte frontal del salpicadero y los paneles de las puertas, dando continuidad a lo que se ve por fuera. El objetivo de Alfa Romeo es mantener ese equilibrio entre una sensación de coche de carreras domesticado y un turismo que se puede utilizar a diario, con un acabado que combina tradición artesanal y elementos claramente tecnológicos.
Motor V6 2.9 biturbo de 520 CV y prestaciones de primer nivel…
Bajo el capó no hay grandes sorpresas, y en este caso es una buena noticia. Tanto el Giulia como el Stelvio Quadrifoglio Collezione recurren al conocido V6 2.9 biturbo de gasolina, un bloque de seis cilindros que en esta serie ofrece 520 CV de potencia máxima y un par que ronda los 600 Nm, por encima de los 510 CV de versiones anteriores de estos modelos.
La mecánica se combina con una transmisión automática de ocho relaciones, sin opción manual, mientras que la tracción varía según el tipo de carrocería: el Giulia Quadrifoglio Collezione mantiene la tracción trasera, orientada a quienes buscan sensaciones más puristas, y el Stelvio Quadrifoglio Collezione recurre a un sistema de tracción total que prioriza el eje posterior pero envía par al delantero cuando es necesario.
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En términos de prestaciones, Alfa Romeo anuncia cifras de deportivo de alto nivel. El Giulia Quadrifoglio Collezione homologa una aceleración de 0 a 100 km/h en torno a 3,9 segundos y una velocidad máxima cercana a los 307 km/h, mientras que el Stelvio Quadrifoglio Collezione, pese a ser más voluminoso, se queda en unos 3,8 segundos en el 0-100 km/h y un pico de velocidad en torno a los 283 km/h. Son registros que lo sitúan como uno de los SUV más rápidos del mercado europeo con motor de combustión.
Escape Akrapovic y frenos carbono-cerámicos de serie…
Para subrayar el carácter especial de esta serie, la marca italiana ha incluido de fábrica un sistema de escape firmado por Akrapovic. Este componente, habitual en preparaciones de alto rendimiento, modifica tanto el flujo de gases como la respuesta sonora del motor, ofreciendo un timbre más marcado y un bramido más presente en aceleraciones fuertes, sin dejar de cumplir con la normativa vigente.
Otro elemento diferenciado son los frenos carbono-cerámicos, también de serie en esta edición Collezione. Además de aportar una resistencia superior a la fatiga en uso intensivo —por ejemplo, en circuito o en bajadas de montaña—, contribuyen a rebajar el peso no suspendido. Visualmente se reconocen por las pinzas anodizadas con la firma roja de Alfa Romeo, un detalle que completa el aspecto deportivo del conjunto tras las llantas.
El uso extensivo de fibra de carbono en componentes estructurales y de acabado, unido a estos frenos específicos y al escape Akrapovic, acerca a Giulia y Stelvio Quadrifoglio Collezione al terreno de los coches de colección más que a una simple actualización estética. No hay cambios radicales en el chasis respecto a otros Quadrifoglio, pero el conjunto de ajustes y equipamiento los sitúa como las variantes más completas y exclusivas de la gama actual.
Contexto de mercado y enfoque para Europa y España…
Alfa Romeo ha ajustado recientemente su estrategia de electrificación para responder a la demanda europea de deportivos con motores de combustión. La nueva generación de Giulia y Stelvio, prevista inicialmente como totalmente eléctrica desde 2027, incorporará finalmente opciones híbridas junto a variantes de cero emisiones. En este contexto llega la serie Quadrifoglio Collezione, concebida como un puente entre el legado térmico de la marca y su futura gama electrificada.
La disponibilidad será muy limitada: solo 63 unidades para Europa y apenas dos para España. Aunque el precio no está confirmado, se situará claramente por encima de los ya elevados Giulia y Stelvio Quadrifoglio, que rondan los 110.000 y 120.000 euros respectivamente. El valor añadido de esta edición —exclusividad, personalización y componentes específicos— apunta a una tarifa todavía más alta, dirigida a un público muy reducido pero fiel al carácter de la marca.
Más que un ejercicio de ventas, esta edición busca reforzar la identidad del Quadrifoglio como icono deportivo en una era dominada por modelos eléctricos silenciosos. Con un V6 2.9 biturbo de 520 CV, frenos carbono-cerámicos, escape Akrapovic, fibra de carbono en abundancia y una producción numerada, los Giulia y Stelvio Quadrifoglio Collezione se consolidan como piezas de culto destinadas a revalorizarse. Para los pocos compradores que accedan a uno de ellos, será no solo un coche, sino un objeto de colección con un fuerte vínculo a la tradición de Alfa Romeo.
Fuente – Alfa Romeo
Imágenes | Alfa Romeo
